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Trata factores de riesgo individuales. El paciente es un receptor pasivo de la asistencia. No se le exige al paciente que realice grandes cambios. El tratamiento suele ser a corto plazo. La responsabilidad recae sobre el médico. La medicación suele ser el tratamiento “final”. Se hace hincapié en el diagnóstico y la prescripción. La meta es el tratamiento de la enfermedad. Escasa consideración al ambiente. Los efectos adversos se compensan con los beneficios. Implicación de otras especialidades médicas. Le médico actúa generalmente de manera independiente e individualizada.

Trata causas del estilo de vida/ambientales. El paciente es un “socio” activo del cuidado. Suele ser preciso que el paciente realice grandes cambios. El tratamiento suele ser a largo plazo. La responsabilidad recae también sobre el paciente. Puede necesitarse medicación, pero se hace hincapié en cambios en el estilo de vida/ambiente. Se hace hincapié en la motivación y el cumplimiento terapéutico. La meta es la prevención primaria/secundaria/terciaria. Mayor consideración al ambiente. Los efectos adversos que influyen sobre el estilo de vida exigen una mayor atención. Están implicados además otros profesionales sanitarios aliados. El médico forma parte de un equipo de profesionales sanitarios